Liberarse de la infelicidad (Eckhart Tolle)

Liberarse de la infelicidad (Eckhart Tolle)

 LIBERARSE DE LA INFELICIDAD

El Poder del Ahora

 Eckhart Tolle

 

    ¿Le desagrada hacer lo que está haciendo?

    Puede ser su trabajo, o puede haber aceptado hacer algo y lo está haciendo, pero parte de usted se resiente y se resiste a ello. 

    ¿Tiene un resentimiento no compensado hacia una persona cercana a usted? 

    ¿Se da cuenta de que la energía que emana por eso es tan dañina en sus efectos, que de hecho usted se está contaminando a sí mismo, así como a los que lo rodean?

    Observe detenidamente su interior. 

    ¿Existe la menor traza de resentimiento, de mala voluntad?. Si la hay, obsérvela tanto en el nivel intelectual como en el emocional. 

    ¿Qué pensamientos está creando su mente alrededor de esta situación? Entonces mire a la emoción, que es la reacción del cuerpo a esos pensamientos. Sienta la emoción. 

    ¿Es placentera o desagradable? 

    ¿Es una energía que usted realmente escogería tener dentro?

    ¿Tiene elección?

    Quizá se están aprovechando de usted, quizá la actividad en la que está involucrado es tediosa, quizá alguien cercano a usted es deshonesto, irritante o inconsciente, pero todo eso es irrelevante. Que sus pensamientos y emociones acerca de esa situación sean justificados o no, no hace ninguna diferencia. El hecho es que usted está resentido a lo que es. Está convirtiendo el momento presente en un enemigo. Está creando infelicidad, conflicto entre lo interior y lo exterior.

    Su infelicidad está contaminando, no solo su propio ser interior y a los que lo rodean, sino también la psique humana colectiva, de la cual usted es parte inseparable. La contaminación del planeta es solo un reflejo exterior de una contaminación psíquica interior. Millones de individuos inconscientes que no asumen la responsabilidad de su espacio interior.

    Usted debe, o bien dejar de hacer lo que está haciendo, hablar a la persona que tiene que ver en el asunto y expresar completamente lo que siente, o abandonar el negativismo que ha creado su mente en torno a la situación y que no sirve para ningún propósito, excepto para fortalecer un falso sentido de usted mismo. Es importante reconocer su futilidad. 

    La negatividad no es nunca una forma óptima de manejar cualquier situación. De hecho en la mayoría de los casos lo mantiene atascado en ella, bloqueando el cambio real.

    Todo lo que se haga con energía negativa, quedará contaminado por ella y con el tiempo hará surgir más dolor, más infelicidad. Además, todo estado interior negativo es contagioso: la infelicidad se extiende más fácilmente que una enfermedad física. Por la ley de la resonancia, dispara y alimenta la negatividad latente de los demás, a menos que sean inmunes, es decir, altamente conscientes.

    ¿Está usted contaminando el mundo o limpiando el desorden? Usted es responsable de su estado interior; nadie más lo es, así como usted también es responsable por el planeta. Lo mismo que ocurre dentro, ocurre fuera: Si los seres humanos limpian la contaminación interior, también dejarán de crear contaminación exterior.

    ¿Cómo podemos abandonar la negatividad?

    Soltándola. ¿Cómo suelta un trozo de carbón caliente que tiene en la mano? ¿Cómo suelta un equipaje pesado e inútil que lleva? Reconociendo que usted no quiere sufrir el dolor o soportar la carga más y después dejándola ir.

    La inconsciencia profunda, tal como el cuerpo del dolor u otro dolor profundo, como la pérdida de un ser amado, a menudo deben ser transmutados por medio de la aceptación combinada con la luz de su presencia, su atención sostenida. Por otra parte, muchos patrones de la inconsciencia ordinaria pueden soltarse simplemente en cuanto usted sabe que no los quiere y no los necesita, una vez que usted se da cuenta de que tiene elección, de que no es solo un montón de reflejos condicionados. Todo esto implica que usted es capaz de acceder al poder del Ahora. Sin él no tiene elección.

    Yo entiendo que deberíamos darnos permiso de tener cualquier sentimiento que surja, en lugar de juzgarlos como malos o decir que no deberíamos tenerlos. Está bien sentirse resentido; está bien estar enfadado, irritado, de mal humor o cualquier otra cosa, de lo contrario entramos en la represión, en el conflicto interior o en la negación. Todo está bien como es.

    Por supuesto. Una vez que un patrón mental, una emoción o una reacción están ahí acéptelo. No fue lo suficientemente consciente para hacer una elección en el asunto. Eso no es un juicio, solamente un hecho. 

     Si usted tuviera elección, o se diera cuenta de que realmente tiene una elección 

    ¿escogería el sufrimiento o la alegría, la tranquilidad o el desasosiego, la paz o el conflicto? ¿Escogería un pensamiento o un sentimiento que lo separa de su estado natural de bienestar, la alegría de la vida dentro de usted? A cualquier sentimiento de este tipo lo llamo negativo, lo que simplemente significa malo. No en el sentido de que “usted no debería haber hecho eso” sino simplemente mal fáctico, como sentirse mal del estómago.

    Es verdad que cuando usted acepta su resentimiento, su mal humor, su rabia, ya no está obligado a actuar ciegamente, y es menos probable que los proyecte en los demás. La verdadera aceptación trasmutaría esos sentimientos inmediatamente.

 

    LA SEPARACIÓN ES LA BASE DEL SENTIDO DE IDENTIDAD DEL EGO


    La verdadera aceptación transmutaría esos sentimientos inmediatamente.

    Y si en realidad usted supiera profundamente que todo está “bien”. Lo que por supuesto es verdad, ¿tendría esos sentimientos negativos?…
    Sin juicio, sin resistencia a lo que es, no surgirían.
    Usted tiene una idea en la mente de que “todo está bien”, pero en el fondo no lo cree, así que los viejos patrones mentales-emocionales de resistencia están todavía en su lugar. Y eso es lo que lo hace sentir mal.
    Una vez se dé cuenta de que cierto tipo de alimento lo enferma 
¿continuaría comiendo ese alimento y asegurando que está bien estar enfermo?