¿Por qué gritamos?

¿Por qué gritamos?

 

¿ POR QUÉ GRITAMOS ?

 

 

 

    Cada vez hay más ruido a nuestro alrededor, vayamos donde vayamos el ruido nos persigue y cada vez tenemos que esforzarnos más para ser escuchados o para hacernos entender. Vivimos en una sociedad donde el ruido forma parte de nuestra existencia.

 

    Cada vez más llenamos nuestras vidas de ruido, que llena el vacío que sentimos, cuando la mejor arma para luchar contra las emociones que nos asaltan y nos dominan es el silencio y la paz interior.

 

    El silencio es sanador y necesario para combatir la adicción que tienen nuestras mentes al ruido.

 

    Ponemos música a todo volumen para no escuchar nuestro parloteo interno o hablamos sin cesar aunque no tengamos cosas importantes que decir.

 

    Pero no solo convivimos con el ruido externo, si no que nosotros añadimos los gritos que exteriorizan nuestra inestabilidad interna.

 

    Gritamos cuando nos enfadamos con alguien o cuando queremos que nuestra opinión prevalezca por encima de la del otro.

 

    Cuando existe una distancia considerable con respeto a otra persona y pretendemos que note nuestra presencia es lógico que alcemos la voz para llamar su atención y conseguir establecer una conversación.

 

    Entonces ¿porqué gritamos cuando estamos enfrente del otro?.

 

    Porque en nuestra alteración emocional, debido al enfado o al orgullo, no somos capaces de oírnos y por tanto pensamos que la otra persona tampoco nos escucha.

 

    Nuestro ego además sale a relucir y hace que menospreciemos a los demás para que solamente nosotros seamos los protagonistas.

  

Encarna

 

 

    A continuación un cuento tibetano que nos puede hacer reflexionar y hacer que nuestra actitud cambie la próxima vez que nos descubramos gritándole a alguien.

 

 

    Cuenta una historia tibetana, que un día un viejo sabio preguntó a sus seguidores lo siguiente:

 

        - ¿Por qué la gente se grita cuando están enojados?

 

    Los hombres pensaron unos momentos:

 

        - Porque perdemos la calma -  dijo uno -  por eso gritamos.

 

        - Pero ¿por qué gritar cuando la otra persona está a tu lado? - preguntó el sabio - ¿No es posible hablarle en voz baja? ¿Por qué gritas a una persona cuando estás enojado?

 

    Los hombres dieron algunas otras respuestas pero ninguna de ellas satisfacía al sabio.

 

    Finalmente él explicó:

 

    - Cuando dos personas están enojadas, sus corazones se alejan mucho. Para cubrir esa distancia deben gritar, para poder escucharse. Mientras más enojados estén, más fuerte tendrán que gritar para escucharse uno a otro a través de esa gran distancia.

 

    Luego el sabio preguntó:

 

        - ¿Qué sucede cuando dos personas se enamoran?.  Ellos no se gritan, sino que se hablan suavemente ¿Por qué? Sus corazones están muy cerca. La distancia entre ellos es muy pequeña.

 

    El sabio continuó

        - Cuando se enamoran más aún, ¿qué sucede? No hablan, sólo susurran y se vuelven aun más cerca en su amor. Finalmente no necesitan siquiera susurrar, sólo se miran y eso es todo. Así es cuan cerca están dos personas cuando se aman.

 

    Luego dijo:

 

        - Cuando discutan no dejen que sus corazones se alejen, no digan palabras que los distancien más, llegará un día en que la distancia sea tanta que no encontrarán más el camino de regreso.